El ritmo cardíaco y la presión arterial de un individuo son reflejos de su nivel de condición física. La rapidez con la que la frecuencia cardíaca y la presión sanguínea regresan a la normalidad después de una actividad es un excelente indicador de la salud de su corazón. ¿Desea saber cómo el funcionamiento afecta su presión arterial y cuánto tiempo tarda su BP en volver a la normalidad después de la ejecución? ¡Tenemos las respuestas!
¿Qué es la frecuencia cardíaca y la presión arterial?
Ejercicios como correr, trotar, nadar, etc. son beneficiosos para mantener el corazón saludable y mejorar su capacidad para distribuir la sangre de manera eficiente a través del cuerpo. Los parámetros vitales utilizados para evaluar la salud del corazón son la frecuencia cardíaca o el latido del pulso y la presión arterial (PA). La frecuencia cardíaca se define como la cantidad de contracciones del corazón, es decir, latidos cardíacos por minuto. La presión arterial generalmente se expresa en términos de presión sistólica y diastólica. La presión máxima ejercida por el corazón para bombear sangre durante un latido se conoce como presión sistólica; mientras que la presión diastólica se refiere a la presión mínima entre los latidos.
¿Cuánto tarda su BP en volver a la normalidad después de correr? ?
Comúnmente se observa que la presión arterial desciende ligeramente por debajo de los niveles de reposo después de correr o hacer ejercicio enérgicamente y luego vuelve a la normalidad después del descanso. La frecuencia cardíaca generalmente vuelve a la normalidad en uno o dos minutos después de correr, pero la presión arterial vuelve a la normalidad a un ritmo más lento y puede tardar varias horas en normalizarse después de la carrera. El ejercicio aeróbico constante ha demostrado reducir las lecturas de presión arterial en reposo a lo largo del tiempo. Los estudios han demostrado que correr durante al menos 30 minutos, tres o cuatro veces a la semana puede ayudar a controlar la presión arterial de manera efectiva. Un período de enfriamiento después del ejercicio o correr permite que la respiración y la frecuencia cardíaca recuperen gradualmente los niveles normales y también puede ayudar a prevenir los mareos.
¿Cuáles son los niveles normales de presión arterial y frecuencia cardíaca?
Una lectura sistólica de 120 y diastólica de 80 se considera la presión arterial normal para adultos sanos. La presión arterial generalmente tiende a aumentar por la noche y puede leer hasta 130/85 mmHg. BP disminuye ligeramente después de ejercicios vigorosos como correr y lee alrededor de 110/70 mmHg. La presión arterial de los atletas que participan en el entrenamiento regular por lo general se mantiene en el rango de 110/70 mmHg. La lectura de la presión arterial superior a 140/90 mmHg se considera alta y cualquier lectura por debajo de 90/60 mmHg se considera baja. Cualquiera de las lecturas extremas son alarmantes y requieren tratamiento médico. La presión arterial se mide en reposo, con el individuo sentado y no participando en ninguna actividad física. La frecuencia cardíaca de reposo promedio para niños mayores de 10 años y adultos es de 60 a 100 latidos por minuto. Para los atletas bien entrenados, es de 40 a 60 latidos por minuto. Estas tasas de reposo son la base para la comparación después del ejercicio. Una frecuencia cardíaca alta y una lectura de presión arterial alta durante el reposo son responsables de aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas independientemente de otros factores de riesgo cardiovascular como el colesterol alto.
¿Cómo afecta el ejercicio y el ejercicio la presión arterial?
de acuerdo con el tipo de ejercicio que se realiza. Ejercicios aeróbicos como nadar, andar en bicicleta y correr aumentan la presión con la que se bombea la sangre, lo que aumenta la lectura sistólica; mientras que la lectura diastólica permanece estable. El ejercicio también ayuda a aumentar y fortalecer los músculos cardíacos para permitir que el corazón circule más sangre con cada latido. Esto implica que a medida que el corazón se fortalece, puede latir más despacio durante la actividad e incluso en reposo. Por lo general, se considera que una frecuencia cardíaca baja indica una mejor salud cardíaca.
¿Cuáles son los signos de peligro con respecto a la presión arterial después de correr?
Se ha observado que las lecturas de presión arterial de las personas obesas se reducen significativamente durante 24 horas después correr o participar en otro ejercicio aeróbico. Cualquier caída en la presión arterial durante estas actividades apunta a posibles problemas cardíacos y debe ser diagnosticada por un médico de inmediato. Cualquier disminución repentina y considerable en la presión arterial observada después de la carrera, que no vuelve a niveles casi normales en 30 minutos más o menos, también indica posibles problemas cardíacos. Un individuo con su presión arterial constantemente por debajo de 90/60 mmHg debe consultar a un profesional médico de inmediato.
Conclusión
Correr es indudablemente un mantra mágico para una vida larga y saludable. No solo mantiene uno en forma, sino que también los alivia de muchas enfermedades. Así que para mantener el corazón fuerte y los problemas cardíacos a raya … ¡CORRER!
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Soy un Neuroanestesiólogo y Especialista en el Tratamiento del Dolor. Me otorgaron el Premio Nacional de Medicina 2018. Soy CEO y fundador de la Unidad Internacional del Dolor de Madrid y editor de Journal Pain Management and Therapy. También es asesor y crítico del AIUM (Instituto Estadounidense de Ultrasonidos en Medicina) y miembro del Comité Organizador de las World Pain Conferences.
Tengo más de diez años de experiencia con terapias regenerativas que incluyen células madre mesenquimales, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento, transferencias de grasa y ácido hialurónico. Inicié Dolor-drdelgadocidranes.com para difundir el conocimiento y la conciencia.
