El saliente o abultado de uno o ambos globos oculares se llama ojos saltones. También se conoce científicamente como proptosis o exoftalmos. Dichos pacientes tienden a parpadear menos y hasta puede parecer como si estuvieran mirando fijamente.
Esta condición no debe confundirse con otros trastornos oculares que cambian la apariencia de la cara o el ojo sin causar un verdadero abultamiento. Algunos de estos trastornos incluyen enfermedad de Cushing glaucoma primario infantil o extrema obesidad .
¿Cómo se puede saber si tiene ojos saltones?
No es fácil diagnosticar ojos saltones por su cuenta, ya que es muy fácil confundirse con otras afecciones médicas que causan ojos hinchados. Si sospecha que uno de sus dos ojos está protuberante, debe consultar a un oftalmólogo para obtener una opinión médica.
El oftalmólogo le preguntará acerca de sus síntomas ópticos, incluido el tiempo que estos síntomas han estado presentes y si ha habido algún cambio en la gravedad de los síntomas. El oftalmólogo luego realizará un examen físico de sus ojos para evaluar la agilidad de sus movimientos oculares. Si se observa alguna anomalía durante estos exámenes, se le puede recomendar que se someta a una tomografía computarizada (TC) o a una resonancia magnética (IRM) para examinar más a fondo sus cuencas oculares. Su oftalmólogo también ordenará una prueba de sangre para verificar si hay alguna anormalidad en la función tiroidea. En base a una combinación de estos resultados, su oftalmólogo determinará si tiene ojos saltones o si el médico sospecha que tiene otra afección óptica, en cuyo caso necesitará un examen más detallado.
¿Cuál es el mejor tratamiento para los ojos saltones?
¿Cómo se tratan los ojos saltones? El tratamiento para ojos saltones depende principalmente de cuál fue la causa inicial de la afección. Si los ojos saltones fueron causados por una enfermedad ocular tiroidea, el oftalmólogo recomendará al paciente que consulte a un endocrinólogo (un especialista en glándulas endocrinas). El endocrinólogo primero iniciará al paciente en un curso de tratamiento para normalizar la función tiroidea y devolver la hormona tiroidea a los niveles normales. El tratamiento de la causa subyacente de la enfermedad es muy importante para evitar un mayor deterioro de los ojos.
Mientras tanto, el oftalmólogo iniciará al paciente en un plan de tratamiento para corregir los ojos saltones. Esto primero implicará reducir la inflamación activa alrededor de los ojos usando medicamentos antiinflamatorios. En general, los pacientes reciben una inyección intravenosa o intravitreol de corticosteroides que tienen un efecto terapéutico rápido. Además, los pacientes necesitan usar lágrimas artificiales cada dos horas para mantener los ojos lubricados y reducir la sequedad e irritación. Los pacientes también reciben educación y se les aconseja evitar fumar ya que agravará su condición y ralentizará el proceso de recuperación. En muchos casos, a menos que se realice una cirugía correctiva, el ojo continúa sobresaliendo. Una vez que la inflamación está bajo control, el oftalmólogo puede recomendar a sus pacientes someterse a tales procedimientos quirúrgicos correctivos para mejorar la estética de sus ojos. En muchos casos, el abultamiento prolongado de los ojos hace que los pacientes desarrollen una visión doble. En función de la gravedad, su oftalmólogo puede recetarle lentes especiales o recomendarle una corrección quirúrgica de la visión doble.
En aquellos casos excepcionales en que el ojo saltón era el resultado de tumores cancerosos, el oftalmólogo recomendará al paciente que consulte a un oncólogo (un especialista en el tratamiento de las alergias). El oftalmólogo trabajará con el oncólogo para recomendar el mejor plan de tratamiento. Algunos de los factores a tener en cuenta incluyen la etapa del crecimiento canceroso, si el cáncer es benigno (ubicado en un área) o maligno (se diseminó a otras regiones del cuerpo), la edad del paciente, el historial médico y la presencia de otros complicaciones médicas Las posibles opciones de tratamiento podrían incluir iniciar al paciente con medicamentos contra el cáncer, quimioterapia o radioterapia y extirpar quirúrgicamente el tumor.
En general, el pronóstico es positivo con una pronta recuperación siempre que la afección se diagnostique y se trate con prontitud.
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Soy un Neuroanestesiólogo y Especialista en el Tratamiento del Dolor. Me otorgaron el Premio Nacional de Medicina 2018. Soy CEO y fundador de la Unidad Internacional del Dolor de Madrid y editor de Journal Pain Management and Therapy. También es asesor y crítico del AIUM (Instituto Estadounidense de Ultrasonidos en Medicina) y miembro del Comité Organizador de las World Pain Conferences.
Tengo más de diez años de experiencia con terapias regenerativas que incluyen células madre mesenquimales, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento, transferencias de grasa y ácido hialurónico. Inicié Dolor-drdelgadocidranes.com para difundir el conocimiento y la conciencia.