La cirugía de la arteria carótida es un procedimiento médico para eliminar los bloqueos de las arterias carótidas y restaurar el flujo normal de sangre rica en oxígeno al cerebro. Esta cirugía también se conoce como endarterectomía carotídea (CEA).
¿Por qué hay que someterse a cirugía de la arteria carótida?
Las arterias carótidas se localizan principalmente a ambos lados del cuello de una persona. Estos son vasos sanguíneos especiales que proporcionan sangre oxigenada al cerebro. Cuando la placa se acumula en estos vasos sanguíneos, crea un bloqueo que hace que la sangre no llegue al cerebro. Esta condición se llama enfermedad de la arteria carótida. Cuando una cantidad significativa de flujo sanguíneo se corta en el cerebro, los pacientes se vuelven susceptibles al ataque cerebral. Por lo tanto, la cirugía de la arteria carótida está dirigida a eliminar dichos bloqueos para un suministro constante de sangre al cerebro.
¿Es peligrosa la cirugía de la arteria carótida?
La cirugía de la arteria carótida es una un procedimiento médico de un día para eliminar la placa en las arterias carótidas. Este es un procedimiento invasivo y puede realizarse bajo anestesia local o general. Debe recordarse que la cirugía de la arteria carótida no es peligrosa porque siempre la realiza un equipo de cirujanos expertos y tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedad de la arteria carótida.
Debe recordarse que todos los pacientes son no sintomático, incluso si tienen algún porcentaje de obstrucción en las arterias carótidas. En tales casos, se pueden recomendar medicamentos y angioplastia carotídea, y no una cirugía de la arteria carótida. De acuerdo con la regla médica, la arteria carótida debe ser muy recomendada para pacientes sintomáticos con un 70-99% de bloqueo presente en las arterias carótidas. Según los médicos, el tratamiento más eficaz para el bloqueo de la arteria carótida moderada a severa es la cirugía. Esto reduce la tasa de complicaciones.
Existen ciertas complicaciones con todo tipo de cirugía. Lo mismo es cierto para la cirugía de la arteria carótida también:
- El paciente puede sentir dolor o entumecimiento en el sitio herido. Esto es normal y temporal y se puede tratar con analgésicos.
- El paciente puede desarrollar una infección de la herida en el sitio de la incisión. El paciente debe informar al doctor en tales casos. Esto puede tratarse con antibióticos.
- Puede haber una probabilidad de daño neurológico menor. Los síntomas de tales daños incluyen voz ronca y sensación de debilidad o entumecimiento en el costado de la cara. Por lo general, tales daños son temporales y desaparecen en un mes.
- Existe la probabilidad de un estrechamiento de la arteria carótida. En tales casos, además, se puede requerir cirugía.
Debe tenerse en cuenta que aunque insignificante, existen riesgos asociados con la cirugía de la arteria carótida:
- Hay aproximadamente un 2% de riesgo de accidente cerebrovascular para los pacientes sometidos a cirugía de la arteria carótida. La probabilidad de accidente cerebrovascular aumenta para las personas que tuvieron un episodio de accidente cerebrovascular antes de la operación.
- Menos del 1% de riesgo de muerte se asocia con la operación que puede ser el resultado de complicaciones como apoplejía o ataque cardíaco.
- Las probabilidades de tal los riesgos son muy menores y están asociados con cualquier tipo de cirugía. Los beneficios de la cirugía de la arteria carótida son mucho mayores.
¿Cómo prevenir el estrechamiento de la arteria carótida?
Tener una cirugía exitosa de la arteria carótida no significa necesariamente que no haya un bloqueo adicional en las arterias. Para evitar el estrechamiento de las arterias:
- El paciente debe seguir una dieta sana y equilibrada. Si el médico aconseja, el paciente debe hacer ejercicio.
- El paciente debe esforzarse por dejar de fumar y reducir el nivel de estrés.
- Se les recomendará a los pacientes que controlen su nivel de colesterol y presión arterial. Si le piden al paciente que tome medicamentos para ello, debería.
Soy un Neuroanestesiólogo y Especialista en el Tratamiento del Dolor. Me otorgaron el Premio Nacional de Medicina 2018. Soy CEO y fundador de la Unidad Internacional del Dolor de Madrid y editor de Journal Pain Management and Therapy. También es asesor y crítico del AIUM (Instituto Estadounidense de Ultrasonidos en Medicina) y miembro del Comité Organizador de las World Pain Conferences.
Tengo más de diez años de experiencia con terapias regenerativas que incluyen células madre mesenquimales, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento, transferencias de grasa y ácido hialurónico. Inicié Dolor-drdelgadocidranes.com para difundir el conocimiento y la conciencia.