La hidronefrosis es una afección patológica que afecta al sistema renal en el que hay inflamación y agrandamiento de los riñones como resultado de una obstrucción entre el riñón y la vejiga que no permite que la orina pase del riñón a la vejiga para su eliminación. Normalmente, un riñón está involucrado en casos de hidronefrosis, pero en algunos casos raros ambos riñones pueden estar involucrados. La hidronefrosis no es una afección médica primaria, sino que surge de otras afecciones que causan obstrucción del tracto urinario.
En circunstancias normales, la orina fluye desde los riñones hasta la vejiga con una presión mínima. Sin embargo, en los casos de hidronefrosis, hay acumulación de orina en el tracto urinario debido a la obstrucción que hace que los riñones comiencen a hincharse y agrandarse. Esto aumenta la presión sobre los riñones y, finalmente, a medida que avanza la enfermedad, los riñones se agrandan tanto que comienzan a ejercer presión sobre los órganos adyacentes, como el hígado.
En última instancia, si la condición se deja sin tratar, se produce un daño permanente en los riñones y el individuo afectado puede sufrir una insuficiencia renal como resultado de la hidronefrosis.
¿La hidronefrosis es reversible?
La respuesta a esta pregunta es sí, la hidronefrosis se puede revertir si la causa de la obstrucción se detecta y trata en las etapas iniciales. La función del riñón comienza a disminuir tan pronto como hay desarrollo de hidronefrosis. Sin embargo, si se trata la causa de la obstrucción y se resuelve la hinchazón, entonces el daño a los riñones es mínimo o nulo y la condición puede revertirse.
Los estudios estiman que el funcionamiento normal del riñón puede regresar hasta seis semanas después de la aparición de la hidronefrosis, después de lo cual las posibilidades de que el riñón funcione de manera normal comienzan a disminuir.
En situaciones en las que la función renal vuelve a la normalidad después de un tratamiento exitoso de la inflamación, se denomina hidronefrosis aguda, mientras que en los casos en que la función renal no vuelve a la normalidad después de que se resuelve la inflamación, se denomina hidronefrosis crónica
En conclusión, los efectos de la hidronefrosis pueden revertirse hasta seis semanas después de la aparición de la enfermedad. En los casos en que la inflamación y la obstrucción se detectan dentro de este período de tiempo, el funcionamiento normal de los riñones está prácticamente garantizado después del tratamiento de la inflamación. Sin embargo, si se pasa esta ventana de seis semanas y aún no se realiza ningún tratamiento para la obstrucción y la inflamación, entonces las posibilidades de que la función renal vuelva a la normalidad comienzan a disminuir incluso después del tratamiento para la hidronefrosis.
También lea:
Soy un Neuroanestesiólogo y Especialista en el Tratamiento del Dolor. Me otorgaron el Premio Nacional de Medicina 2018. Soy CEO y fundador de la Unidad Internacional del Dolor de Madrid y editor de Journal Pain Management and Therapy. También es asesor y crítico del AIUM (Instituto Estadounidense de Ultrasonidos en Medicina) y miembro del Comité Organizador de las World Pain Conferences.
Tengo más de diez años de experiencia con terapias regenerativas que incluyen células madre mesenquimales, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento, transferencias de grasa y ácido hialurónico. Inicié Dolor-drdelgadocidranes.com para difundir el conocimiento y la conciencia.