¿Qué es la pericarditis?
La pericarditis es un trastorno cardíaco humano en el que el revestimiento del corazón se inflama. Este revestimiento se llama pericardio.
¿Qué es el pericardio?
El pericardio es una membrana tisular que encierra el corazón humano y la raíz de los grandes vasos (vena pulmonar, arteria pulmonar, vena cava y aorta). Consiste en dos capas principales: la capa externa resistente llamada pericardio fibroso y la capa interna delgada llamada pericardio seroso.
¿Cuáles son las principales funciones del pericardio?
El pericardio fibroso está hecho de tejido conectivo profundo que mantiene el corazón humano en su posición apropiada en el cofre y lo separa de los órganos internos adyacentes. Por lo tanto, sirve para proteger al corazón humano de infecciones o tumores que podrían diseminarse directamente desde otros órganos cercanos al corazón, como el pulmón o el esófago. Como esta capa es menos flexible y no se estira mucho, también evita que el corazón aumente de tamaño demasiado rápido. Por lo tanto, es útil evitar el sobrellenado del corazón con sangre.
El pericardio seroso consta de 2 capas que son la capa parietal externa y la capa visceral interna. Entre estas dos capas está la cavidad pericárdica que contiene una pequeña cantidad de líquido llamada fluido pericárdico. Esto ayuda a lubricar el corazón humano y previene la fricción causada por la contracción y relajación de los músculos del corazón humano mientras se mueven dentro de la cavidad torácica.
¿Cuáles son las causas de la pericarditis?
La causa más común es un virus infección, seguida de ataque cardíaco y luego ciertas enfermedades como VIH insuficiencia renal o tuberculosis. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la causa es desconocida.
¿Cómo afecta la pericarditis al corazón?
Como se describió anteriormente, el pericardio tiene muchas funciones fisiológicas importantes que ayudan al buen funcionamiento del corazón. La pericarditis conduce a un mal funcionamiento en la realización de estas funciones.
La hinchazón del pericardio hace que los tejidos en el corazón se froten entre sí y aumenta la fricción interna. Esto afecta la velocidad con la que el corazón se contrae y se relaja. La irritación prolongada de los tejidos hace que se acumule un exceso de líquido en la cavidad pericárdica. Esto aumenta la presión sobre las paredes del corazón y, a su vez, afecta la capacidad de la sangre que el corazón humano puede bombear.
La pericarditis puede ser aguda o crónica. En el tipo agudo, la condición se desarrolla repentinamente y generalmente no dura mucho (menos de tres semanas). El síntoma clínico más común que experimentan los pacientes es el dolor de pecho súbito que se asemeja a un ataque al corazón . Sin embargo, este dolor es ligeramente diferente de un dolor de ataque cardíaco. La característica clave diferenciadora de este dolor es que aumenta cuando el paciente inhala y el dolor mejora cuando el paciente cambia de postura para inclinarse hacia delante mientras está sentado. Cuando los síntomas de la pericarditis se desarrollan gradualmente con el tiempo y tardan más en tratarse (más de tres meses), las condiciones son de naturaleza crónica. Ambos pueden alterar el ritmo normal o la función del corazón.
¿Cuáles son las complicaciones derivadas de la pericarditis?
Si no se trata, la pericarditis crónica puede provocar otros trastornos cardíacos graves.
El taponamiento cardíaco es una condición que puede desarrollar si hay exceso de líquido acumulado en el pericardio. Este fluido crea mucha presión sobre el corazón y por lo tanto no permite que el corazón se llene adecuadamente con sangre. Esto significa que el corazón bombea ahora menos cantidad de sangre y esto hace que la presión arterial disminuya. La presión arterial baja excesiva durante un período prolongado podría ser potencialmente mortal.
La pericarditis constrictiva crónica es otra afección que puede desarrollarse si la pericarditis no se trata durante un período prolongado. En esta condición, el tejido cicatricial comienza a formarse a través del pericardio. Poco a poco, esto hace que el pericardio se ponga rígido y dificulta el movimiento del corazón. Los pacientes generalmente experimentan hinchazón severa en las regiones de sus brazos y piernas junto con dificultad para respirar .
El diagnóstico y el tratamiento precoces reducirán el riesgo de desarrollar complicaciones a largo plazo.
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Soy un Neuroanestesiólogo y Especialista en el Tratamiento del Dolor. Me otorgaron el Premio Nacional de Medicina 2018. Soy CEO y fundador de la Unidad Internacional del Dolor de Madrid y editor de Journal Pain Management and Therapy. También es asesor y crítico del AIUM (Instituto Estadounidense de Ultrasonidos en Medicina) y miembro del Comité Organizador de las World Pain Conferences.
Tengo más de diez años de experiencia con terapias regenerativas que incluyen células madre mesenquimales, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento, transferencias de grasa y ácido hialurónico. Inicié Dolor-drdelgadocidranes.com para difundir el conocimiento y la conciencia.